sábado, 7 de julio de 2012

Capítulo I

Dawn iba caminando por la acera hacia el instituto como todas las mañanas, el paseo le ayudaba a despejarse.No había dormido muy bien aunque se sentía completamente despejada, se había despertado con una sensación extraña y bañada en sudor.Había supuesto que era una pesadilla aunque no recordaba haber soñado nada.Al acercarse a la vaya del instituto vio que su mejor amiga, Sara, la estaba esperando.

-Hola, llegas temprano.-Sara reprimió un bostezo.

-Hola, Sara. Si, por raro que parezca hoy ni siquiera tengo sueño.-Dawn pasó a explicarle lo extraña que se había sentido al despertarse.

-Solo ha sido un sueño.

Sara tenía la capacidad de hacer que las cosas parezcan menos de lo que son, pero Dawn pensó que esta vez probablemente tuviera razón y que sería mejor dejar de darle tantas vueltas en su cabeza. Conocía a Sara de toda la vida, habían crecido juntas. A Dawn le parecía que en su pueblo/ciudad (a veces le parecía un pueblo y otras una ciudad pequeña) Sara era un nombre perfectamente normal pero que el suyo llamaba mucho la atención. Sus padres habían pasado  un tiempo en Londres antes de ir a vivir allí, así que a su hermana Katherine y ella habían acabado con nombres ingleses. Se habían mudado cuando Kate tenía dos años y ella todavía estaba en el vientre de su madre; así que, a pesar de su nombre, ella no tenía ninguna relación con Inglaterra como todo el mundo solía pensar.
Su primera clase ese día fue la de historia, normalmente habría estado tan dormida que no se hubiera enterado de nada, aun así prefirió pasar la clase dibujando garabatos en un cuaderno que atender a las aburridas explicaciones del profesor. No se le daba mal el dibujo y aunque no le saliera bien, cosa que pasaba muy pocas veces, lo que le importaba era la tranquilidad que adquiría cuando dibujaba. El resto de la mañana pasó de forma similar, prestaba atención en las clases en las que tenía mas problemas y pasaba el resto dibujando lo que veía por la ventana. Por fin llegó la hora del recreo donde Sara y Dawn se sentaron a la sombra de un árbol, su lugar favorito, y almorzaron hablando de sus respectivas familias.

-Dawn, ayer vi a tu hermana, pasó delante de mi casa con Pablo. ¿Ha dejado a José?-a Dawn se le escapó una sonrisa.

-Estás un poco perdida, dejó a José hace más de dos semanas.Aunque veo que no le ha costado mucho superarlo. Espera a que se enteren mis padres.

Los padres de Dawn podían llegar a ser muy sobreprotectores con el tema de los novios, Dawn no había tenido ninguno pero su hermana si.Cuando sonó el timbre se dirigieron muy lentamente a su siguiente clase intentando retrasar el momento lo máximo posible.


Dawn comió con sus padres y su hermana, era uno de los pocos momentos en los que estaban todos juntos como una familia. Después de comer su madre se iba a trabajar, su padre entraba más tarde por lo que se echaba la siesta hasta la hora de irse y su hermana siempre quedaba con alguna persona. Subía a mi cuarto y encendí el ordenador, Sara ya estaba conectada. Dawn fue la primera en  iniciar la conversación.

-Hola, sales sta tarde?

-Lo sent, tengo q cuidar de mi hermano pequeño, mis padres salen a algun sitio.

-Algun sitio?

-Jajajaja, si, no se exactamente a dond, solo se q tengo q cuidar de Marcos.

-Ok, entonces saldre a dar una vuelta.

-Ten cuidado con Dany.

Dany (su nombre completo era Daniel) había sido uno de sus mejores amigos, pero entonces  empezó a pedirle que saliera con él. Se había puesto tan pesado que al final Dawn acabó por romper su amistad con él. A pesar de eso, ultimamente le había dado por seguirla allá donde fuera, cosa de lo más incomoda.También había sido amigo de Sara, pero cuando empezó a perseguir a Dawn había dejado de hablarse con el.Dawn pensaba que Dany estaba empezando a pasarse de la raya.

-No te preocupes, sabes q  lo tengo.

-Ok, pasalo bn y traeme un dibujo.

-No me olvidare, hasta luego.

-Adios.

Dawn cerró el ordenador, su madre y su hermana ya se habían ido, su padre seguía dormido. Cogió una libreta y un lápiz, no necesitaría más, una chaqueta y salió por la puerta.Caminó unas cuantas calles asegurándose de no encontrarse con Dany. Se relajó una vez llegó a la linde del bosque. Habían unas cuantas sendas, pero Dawn casi nunca las utilizaba,conocía muy bien el bosque y jamás se perdía. Sabía que Dany no la buscaría en el bosque, porque sería incapaz de encontrarla.Se dirigió a su lugar favorito, un pequeño claro oculto por los arboles desde donde se podía observar un trozo de cielo. El lugar estaba vacío, nadie iba nunca allí excepto ella. Se sentó con la espalda apoyada en un tronco de árbol y se puso a dibujar un pajarillo que la miraba desde una rama con ojos curiosas, poco a poco se fue quedando dormida gracias a la tranquilidad del lugar, donde solo se escuchaba a los pájaros y el viento.Se despertó sobresaltada, notando una sensación eléctrica en el aire, todos los pájaros dejaron de cantar y el claro se sumergió en un silencio nada natural. Dawn vio que algo había aparecido en el centro del claro. Se acercó con cuidado, ¿como había llegado ahí?. Parecía un huevo, pero tenía que ser de un animal muy grande y por esa zona no había avestruces, además tenía un color raro, era purpura. Asombrada por su color acercó una mano rozando suavemente su superficie, era liso, duro y estaba caliente.De repente empezó a zarandearse fuertemente y aparecieron grietad en la superficie, Dawn apartó la mano pero no se alejó.Poco a poco fue saliendo un pequeño cuerpo del mismo color que la cáscara del huevo.Era del tamaño de un gato, recubierto de escamas, sus cuatro patas acabadas en afiladas garras, su cola se movía lentamente de un lado a otro, estiraba sus alas más grandes que su cuerpo. Le miró directamente a los ojos, daba la impresión de que sabía exactamente lo que hacía.Dawn había leído libros y visto películas, se dio cuenta de lo que tenía delante. Un dragón.

viernes, 6 de julio de 2012

Sinopsis

Dawn es una chica de 16 años con una vida completamente normal, y muy aburrida, en un pueblo que apenas llega a ciudad situado en La Rioja, España. Ha vivido allí toda su vida con sus padres y su hermana mayor. Sus mayores pasiones son la música y el bosque, al que va a menudo y que conoce tan bien como la palma de su mano. Su aburrida vida da un giro de 360º cuando en uno de sus paseos aparece ante ella un huevo del que sale una dragona de color purpura, eso sin contar al extraño chico que acaba de aparecer en el pueblo que la evita a pesar de que siempre le esta mirando fijamente.La vida de Dawn se vuelve patas arriba con un montón de consecuencias y un destino que no ha elegido, pero que se verá obligada a cumplir.